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INVOCACIÓN
Porque hay tantos abismos
entre hermanos,
y entre pueblos.
Porque hay tantas heridas
que aún esperan
el consuelo.
Porque hay tantas palabras
atrapadas
en silencios.
Porque hay tantos amores
aún pendientes
de algún gesto.
Porque hace falta un “Hágase”
que fecunde
lo yermo…
Te seguimos pidiendo
Madre reconciliadora,
que nos tiendas un puente
para salvar distancias.
Señora del afecto,
que nos muestres la senda
del encuentro.
Hogar de la Palabra,
que nos des el valor
de ser sinceros
Maestra del amor,
que nos abras
la puerta de lo cierto.
Testigo de tu Hijo,
que en tu entrega
encontremos Su reflejo.
José María R. Olaizola, sj
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