Hoy, Miércoles de Ceniza, la Iglesia comienza el tiempo litúrgico de la Cuaresma, que celebraremos este sábado 17 con el rezo del Vía Matris (19 horas en la iglesia de San Andrés).
Con la tradicional marca de la ceniza en la frente recordamos nuestra fragilidad y nuestra debilidad. Desde la fragilidad, la debilidad, y los límites, se abre un camino para el encuentro con Jesús. Por delante cuarenta días parar descubrir cómo va marcando nuestra vida, cómo nuestra fragilidad, debilidad y límites son superados con el perdón sin condiciones, con la libertad.
Estamos invitados a vivir la Cuaresma como un tiempo de liberación. Estos días tenemos la oportunidad de experimentar un modo de entender la vida en total libertad. Pueden ser escuela para el resto de los tiempos. La limosna, la oración y el ayuno no son cargas pesadas sobre nuestras espaldas que ahora tocan y que podemos olvidar dentro de unas semanas. Son una auténtica revolución y alternativa para vivir con sentido.
Danos, Virgen de la Saleta, un corazón dispuesto a acoger la invitación de tu Hijo y a permanecer en ella.
