El pasado fin de semana nuestra Asociación realizó una peregrinación al Santuario de la Virgen de la Saleta en la localidad de Siador (Silleda-Pontevedra). En dicho lugar se rindió culto a la Virgen de la Saleta por primera vez en España y es la sede de la comunidad española de los Misioneros de la Saleta desde 1986. El domingo, el grupo compuesto por 22 cofrades, visitó Santiago de Compostela.
La jornada comenzó temprano, emprendiendo el viaje en autobús desde Zamora y realizando una parada en Orense, donde se visitó el casco antiguo, la iglesia de Santa Eufemia y el puente medieval que cruza el río Miño. Alrededor de las 14 horas el grupo llegó a Siador, donde fue recibido por varios misioneros y tres miembros del grupo de laicos de la Saleta. En el interior del santuario, el padre Gerardo Comeau, ms. superior de la comunidad dio la bienvenida a los cofrades, esbozando brevemente la historia del lugar y recordando al misionero Juan Magro ms, que dedicó buena parte de su misión a divulgar la devoción de la Saleta por todo el país y que salvó al grupo escultórico de Zamora de su desaparición en los años 60.
Después de compartir el almuerzo al aire libre en ambiente de fraternidad, los cofrades fueron invitados a visitar el Pazo de Sestelo por sus dueños, Roberto Rivas y Maria Eugenia Espinosa. En la capilla de dicho pazo el tatarabuelo de Roberto Rivas, Francisco María Rivas Taboada, comenzó el culto a la Virgen de la Saleta en España en 1863, rezando la novena ante una estampa. El año siguiente se adquiriría por suscripción popular el grupo escultórico que hoy recibe la veneración de los fieles en la parroquia de Siador, y desde donde se extendió la devoción a muchas poblaciones de Galicia y del resto del país.
Alrededor de las 18 horas se celebró la Misa en el Santuario, finalizando con la entrega de una fotografía de la Virgen de la Saleta de Zamora a los misioneros como recuerdo de la jornada. En su homilía, Gerardo Comeau, ms., remarcó que la figura de María ha de ser siempre contemplada junto con la de Jesús y animó a los cofrades zamoranos a seguir trabajando en su Asociación.
El domingo, antes de visitar el sepulcro del Apóstol de Santiago en la catedral compostelana el grupo visitó el Museo do Pobo Galego, ubicado en el antiguo convento de Santo Domingo de Bonaval. Ya por la tarde y tras almorzar en Caldas de Reis se visitó brevemente la capilla del Pazo de La Saleta, en Meis (Pontevedra).